100628_miley2.jpgProvocativa y rebelde son los adjetivos que mejor definen la imagen que Miley Cyrus en su último disco que está a la venta desde el pasado 22 de junio, titulado ‘Can’t be tamed’.

Este disco ha salido en dos versiones: un CD simple, con 12 canciones, y otra edición que acompaña el disco con un DVD con imágenes inéditas de su gira Wonder World Tour.

Además, el disco ha sido producido por John Shanks, que ha trabajado con artistas del calibre de Sheryl Crow, Celine Dion, Kelly Clarkson y Bon Jovi. Un productor de lujo para un disco con el que Miley dice adiós a la niña que era cantando que «no puede ser domesticada», aunque quedan aún sus imágenes más dulces en Big Fish y en Hannah Montana.